Muy bien
Las servilletas estaban manchadas, demoraron en traer la bebida y trajeron una copa mal fajinada. En la descripción de la carta tenían paté y tostadas pero nunca trajeron las tostadas, tuvimos que pedirlas y nos trajeron un pan sin tostar y mal cortado. Pedimos 2 menú día y trajeron entrada de uno solo: la masa (eran una especie de harumakis veggie) parecía no tener sal. Finalmente trajeron la otra entrada y más tarde los principales que eran pesca del día y que nos la vendieron como lenguado pero no lo era. La porción de mi plato (soy mujer) notablemente más chica que la de mi amigo varón. La piel de la pesca no estaba crocante, había restos de comida sobre la misma de una plancha mal limpiada y la guarnición que era repollo y zanahorias tenía las zanahorias quemadas y crudas en el corazón, el sabor del plato en su totalidad aceptable. Tuve que acercarme hasta la barra en el interior del salón para pedir más vino y nunca nos ofrecieron una frapera (arriba de 30° de calor a la fecha). Cuando pedimos el postre (último paso) descripto en el menú como arroz con leche bruleado, el camarero nos ofreció un lingote de chocolate con helado y cuando le consultamos por el arroz con leche se dio cuenta de que se había equivocado y ofrecido un postre del menú a la carta y nos trajo dos porciones mínimas de lingote, tamaño degustación y sin el helado. Pedí un cenicero y tuve que apagar el cigarrillo en el piso del boulevard por la demora. Cuando pedí la cuenta tuve que acercarme a la caja para que me cobraran porque estaba atrasada y la chica de la barra que estaba con el teléfono en la mano me preguntó que quería mientras tenía la cuenta de mi mesa y otras dos cuentas más acumuladas sin cobrar... a lo que respondí que por favor me cobrara ya que tenía que irme.
Fuimos para brunchear. Estuvimos todos muy decepcionados. Varias demoras largas y inexplicadas. No nos dejaron muchas cosas (entradas y tragos) que pedimos, pero igual intentaron a cobrarnos. La calidad de la comida fue comicamente mala.
Uno de los platos me llegó incompleto con la mitad de los ingredientes que figuraba en la carta. Esto no puede pasar en un restaurante que ofrece comida de pasos.
Fuimos 2 por un brunch al mediodía, muy bien equilibrado, porciones adecuadas y agradable combinación de platos. El punto de la carne tal como lo pedimos. Excelente ambientación, mesas separadas y protocolo adecuado.
Cuando fuimos, la luz se había cortado y estaban usando un generador. Aún así, el personal actúo rapidito, se adaptó a las necesidades. La comida sigue siendo igual de genial a como la recordaba.
La comida todo excelente, el lugar hermoso. La atención no fue muy buena porque hubo un error en el pedido que anotó la persona que nos atendía, no era muy cuidadosa a la hora de servir.
Excelente comida, muy buena relación precio calidad.volveré seguramente
Muy buena la comida. La Presentación de los platos y buena atención. Los precios muy acordé. El ambiente en el pasaje tranquilo y pintoresco. Muy recomendable.
La carne la pedí en punto bleu y me la trajeron pasada totalmente cocida. El vino caliente. La atención mala. Tiene una alta rotación del personal de servicio, no están capacitados, cocina deficiente
Lugar muy acogedor, con mesas al aire libre, especial para noches de verano, en un pasaje de barrio norte, en una cena de año nuevo, com menú preestablecido, con bebida libre, yo tome champagne toda la noche y en ningun momento escatimaron, comida de cuatro pasos, con postre y brindis con una torta de chocolate exelente y champagne dulce. Todo exelente, mi unica critica es que al ser todo preestablecido, el tercer paso era un ceviche de lenguado y no a todas las personas le gusta el pescado crudo y no habia opsiones de cambio. El resto exelente, voy a volver
La comida riquísima, el servicio muy bueno, cariñosos y muy acogedores! el menú preciso y los tiempos también. lo recomiendo para ir en cualquier época del año
Pensamos ir para un brunch y nos encontramos con una carta súper acotada. Comimos bien spero nada que nos deslumbrara de acuerdo a la categoría del lugar
Tardaron media hora en atendernos, y lo hicieron por nuestro reclamo, la camarera de muy mal humor y carácter, el menú cambio y los platos no nos gustaron. Habíamos estado 2 semanas atrás y el menú era muy bueno. Este ni siquiera parece de verano, tiene sándwiches x la noche que ya marca también el nivel .. una pena para un chef reconocido.
Hermoso lugar! La carta con pocas opciones, pero variada. La cantidad de comida depende de la elección del plato, algunos moderados, otros abundante. La comida muy rica, con relación precio-calidad. La atención muy buena también. Lo único negativo es que debimos esperar muchísimo tiempo para que trajeran el plato principal. Salvo esta cuestión, perfecto todo.
El pasaje es precioso, cenar en la mesas que están sobre el pasaje al aire libre fue la mejor opción, fue lo mas lindo de la noche. La entrada (ceviche) estuvo muy rica, pero el resto no estuvo a la altura de nuestras expectativas. El vino no llegó a temperatura, tu vino que pedir que lo refresquen, el primer plato principal tardó mucho en llegar, y cuando lo trajeron la comida estaba fría , tuvimos que pedir que lo calienten, y no respetaron los ingredientes que indicaba la carta. Destaco la buena predisposición del mozo y su buena atención. Pero más allá de eso, el lugar merece darle la oportunidad de conocerlo y probar suerte en alguno de los dos restaurantes.
Hemos ido varias veces y tenido una experiencia muy buena. Pero las dos ultimas veces me sentí estafada. No había hielo, no había servilletas, la comida tardó 1 hora y media y llegó fría. Nada que ver la calidad de los platos de antes, la verdad que no me paré y me fui porque no quería arruinar el sábado familiar. Los ñoquis un masacote. La carne nada que ver la guarnición con la original, un panqueque de papa con cebollas de verdeo enteras. La pesca para compartir, un papelón! La verdad que no voy a volver. Al menos hasta que me aseguren que mejoraron la calidad. Algo pasó! Una pena!
Todo muy bien, turnos de dos horas, más que suficiente para comer entrada, principal y postre. Les pedimos cambiarnos de mesa y no hubo drama. La comida muy rica y buena relación precio calidad. Buen ambiente también.
Tuvimos que cambiar 3 veces de pedido porque no había lo que queríamos comer pero el mozo no estaba informado. La carne vino quemada y pasada El vino vino caliente La morcilla vino quemada. Con mi novia terminamos destacando el pan...
Las porciones pequeñas . Tardan mucho en traer la comida. La carta muy acotada. no hay variedad en el menu. No tienen ensaladas . Los precios normales.
Esperamos 30 minutos por una mesa reservada soportando el trato de los mozos que se manejaban de muy mala manera. Carta de vinos limitada, lo mismo que la de postres. La comida nada espectacular. No lo recomiendo
Abierto todos los días
Vicente López 1661, C1018ABA, Buenos Aires, Argentina
Ubicado en un lindo sector de Recoleta, uno de los emblemáticos barrios de la Ciudad de Buenos Aires, destacado por su arquitectura y cercano a varios sitios turísticos como el Museo de Bellas Artes y la Floralis Genérica se encuentra BIS. Un restaurante dentro del conocido Pasaje del Correo, que cuenta con dos espacios al exterior con mesas que remiten al buen vivir de antaño y el interior cálido y ambientado con detalles sutiles y especiales.
De su variada carta de presentaciones se destacan el cuadril de cordero, el pulpo a la leña y los buñuelos de Kale; acompañados de exquisitos vinos y tragos de autor.
El restaurante BIS tiene un ambiente relajado, con buena música y excelente comida, es el lugar ideal para una cena romántica o para quedar bien con aquél amigo turista.
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